Antes de irse me escribió, en la superficie absorbente de una servilleta, su dirección postal, su correo electrónico y su página web que era su nombre.
La servilleta quedó olvidada año y medio entre mapas, más servilletas, sobres de azúcares y tickets de museos, hasta que hoy, buscando otra cosa, apareció. Por mera curiosidad entré a su página en internet y sorprendido me enontré con que Stefan Glerum es: un ilustrador impresionante con marcadas influencias de la Bauhaus, un gran conocedor de las tipografías, el color y el sentido del humor y un coleccionista empedernido amante de los vinilos.
La siguiente es una ilustración que está incluida en un proyecto muy bonito y original que se llamá "140 Hits in art", donde le pidieron a varios artistas que ilustraran su canción favorita, Stefan elijió Drunk Trompet del fabuloso Kid Koala.

Sobresaliente en sus ilustraciones, son los personajes que inventa, por lo general bandas musicales que parecen sonar sensacional, trompetistas azules que se inspiran en salchichas que alimentan la flexibilidad del Dios del Funk.

O divertidas bandas tribales del espacio exterior con los ojos estrellados.

2 comentarios:
wooow. esos encuentros cosmicos del camino son otro pedo. particularmente este...
Sss... es para platicarla a los mas jóvenes! chida anécdota!
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